sábado, 10 de enero de 2009

¿Publicidad inteligente?

Podría haberlo titulado “El mejor anuncio de la historia”... Mira que estoy tonto...
En esta ocasión quería mostrar el efecto que la publicidad inteligente puede hacer ante el potencial cliente. Contra el “busque, compare, y si encuentra algo mejor, cómprelo”, se estila y explota la efectividad de la inteligencia emocional. Lo importante no es tanto mostrar las posibles veleidades del producto, como el ingenio a la hora de exponerlo. El público siente que ese mensaje valora su forma de ser. Se siente halagado, y privilegiado. Ese mensaje es para mi, ya que yo soy muy listo, muy sensible, y no me trago los mensajes burdos de la publicidad más convencional.
En el mundo de la publicidad, los publicistas van por un lado, y los clientes por otro, como podemos ver en “Mad men”. El punto de fusión interesante suele ser el momento en que ambos están en concordancia; esto es, cuando el mensaje inteligente, sensible, indirecto, también vende. Pero la búsqueda del “target” se ha convertido en el elemento clave. Producto para quién, como y cuando. Aunque al cliente lo único que normalmente le preocupa (con razón, claro), es que una vez expuesta una campaña, sus ventas suban. Le interesa las cifras, no el ingenio. Me acuerdo de uno de los anuncios más lamentables que recuerdo, no retrotrayéndonos excesivos años:


Si no recuerdo mal, después de esta campaña las ventas de Central Lechera Asturiana subieron un 16-17%. La marca contentísima con su anuncio, y la agencia también. Además ésta defendía a capa y espada que este era un gran anuncio; había logrado claramente su objetivo, que no es otro que el de alzar las ventas.
En realidad esta búsqueda del camino a seguir, es comparable por poner un ejemplo clarificador, con la búsqueda del resultado en el fútbol; existe los “métodos” Clemente y Cruyff. Ambos buscan el resultado, pero por caminos distintos.
Aquí pongo algunos ejemplos interesantes de esa “otra publicidad”.





Saludos.

1 comentarios:

Anónimo dijo...

Si vendes tu ingenio es porque eres un mercenario, como casi todos. Lo vendes para que hagan con él lo que quieran y sin mala conciencia porque aunque ellos solo sepan de cuotas de mercado a ti lo que vendes te vuelve a crecer y encima da gustirrinín :)